Aprobada en México como coadyuvante en el tratamiento para bajar de peso por la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios, Liraglutida ingresa al mercado farmacéutico nacional como el primer fármaco inyectable que además colabora en el control de glucosa para pacientes con diabetes tipo II.
Se trata de una sustancia que incide en la hormona que produce el intestino y que ayuda en la regulación del hambre y la saciedad, glucagón tipo 1 (GLP 1), de manera que ralentiza el vaciamiento gástrico y contribuye a reducir las ganas de ingerir nuevos alimentos.
El fármaco, desarrollado por la firma danesa Novo-Nordisk, también estimula a las células beta del páncreas para que produzcan más insulina en pacientes con diabetes tipo II, lo cual reduce la posibilidades de tener que inyectarse esta hormona para el control de glucosa en sangre.
Liraglutida es un inyectable que se aplica de forma subcutánea empleando una pluma con una base de 18 miligramos de fármaco y se prescribe de manera escalonada a partir de 0.6 miligramos por semana hasta llegar a dosis de tres miligramos.
El costo del medicamento es de mil 50 pesos y su duración aproximada es de cinco semanas, señaló el doctor Juan Gabriel Cendales, director médico de Novo Nordisk México.
Cabe advertir que el médico tratante deberá hacer los ajustes necesarios en el paciente sobre la dosis, de acuerdo a las evaluaciones del escalonamiento en la administración del fármaco, sobre todo si se administra insulina o bien medicamentos orales, como metformina, detalló la doctora Guadalupe Castro Martínez, directora de la Facultad de Medicina de la Universidad La Salle.
La académica añadió que si bien el fármaco provoca un efecto fisiológico saciante y que ha demostrado eficacia en la reducción de peso, no debe dejarse de lado el cuidado nutricional y la actividad física.
Para comprobar su eficacia, Liraglutida fue sometida a un estudio de tres años con 171 pacientes mexicanos, en 11 centros hospitalarios de la Ciudad de México, Cuernavaca, Chihuahua, Guadalajara y Monterrey. Los efectos secundarios registrados tienen que ver con el aparato digestivo, principalmente náuseas y vómitos.
En promedio, los pacientes diabéticos redujeron la cantidad de azúcar en su sangre entre uno y 1.5 por ciento. Lo anterior cobra importancia si se considera que porque cada vez punto porcentual que baje la glucosa, se reduce en 20 por ciento el riesgo de que el paciente tenga daños en las arterias y vasos que le producen ceguera por retinopatía y daño al riñón y otros efectos graves.
De acuerdo a la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición 2012, sobrepeso u obesidad están presentes en 71.28 por ciento de los adultos mexicanos. Únicamente en la Ciudad de México, 73.6 por ciento de los adultos viven con exceso de peso, lo cual pone en peligro su salud.
La obesidad ha sido vinculada directamente con 14 tipos de enfermedades, incluyendo la diabetes tipo II, cáncer, enfermedades cardiovasculares e incluso la muerte, por lo que urge ser entendida y atendida de manera integral.
México es el primer país en América Latina en que Liraglutida se pone a la venta.
Agencia ID