La pantalla rojiza no es el único problema que afecta a los Samsung Galaxy S8, ya que también se han reportados fallos en la conectividad Wi-Fi, en la cual los equipos en cuestión se desconectaban constantemente de este tipo de redes inalámbricas.
Esta falla fue detectada principalmente en los Galaxy S8 y S8+ vendidos en Estados Unidos y Canadá, presentándose después de la instalación de una actualización de software de “día-uno”; luego de aplicar la actualización, cada minuto o 30 segundos aparecía una ventana emergente indicando que la aplicación DQA había dejado de funcionar. DQA (Device Quality Agent, Agente de Calidad del Dispositivo en español) es un módulo encargado de mantener la calidad de la conexión Wi-Fi en estos teléfonos.
El parche para reparar el mal funcionamiento de DQA empezó a desplegarse poco a poco el 24 de abril, pero ahora cada vez más usuarios de los S8 en los países ya mencionados ya pueden instalarlo en sus teléfonos mediante la tienda Galaxy Apps. La actualización apenas supera los 900 kilobyes y la instalación toma menos de 10 minutos.
Hasta ahora, la única “solución” era forzar el cierre de la aplicación DQA, o simplemente evitar utilizar el Wi-Fi de los equipos. Respecto a la pantalla rojiza, Samsung ya ha declarado que pronto todos los equipos recibirán la actualización que permitirá ajustar los colores del panel.
Fuente: Android Central