Los pagos digitales en México son una realidad desde hace varios años, y cada vez más personas hacen uso de esta herramienta.
Los consumidores en Latinoamérica han demostrado el interés en adoptar nuevos métodos de pago como las billeteras digitales. Por ejemplo, los usuarios activos de la billetera virtual de Mercado Pago en el segundo trimestre de 2019 se triplicaron respecto al mismo período del año anterior, alcanzando los 4.5 millones de usuarios activos en la región.
A pesar de las múltiples ventajas que ofrecen las billeteras digitales, en nuestro país aún existen barreras que impiden el crecimiento en la adopción de pagos digitales que tienen que ver con la desconfianza de los usuarios en la seguridad de estos métodos de pago.
De acuerdo con un análisis elaborado en 2019 por The Competitive Intelligence Unit (CIU), en México el nivel de adopción de las billeteras digitales es de tan sólo el 6.6 por ciento de la población, las causas van desde el desconocimiento y el poder adquisitivo, hasta las habilidades digitales y la desconfianza en cuanto a seguridad.
Ante este escenario, las instituciones financieras tradicionales y fintech que ofrecen servicios de pagos digitales están enfocadas en desarrollar sistemas que otorguen mayor seguridad a los consumidores con tecnologías que protejan la información financiera de los usuarios.
¿Qué hay detrás de un pago digital?
Existen tecnologías que ayudan a mejorar la experiencia de los pagos digitales, como las APIs, Application Programming Interface, que funcionan como una llave de acceso entre dos sistemas para intercambiar información de forma segura. Es decir, cuando se procesa un pago a través de billeteras digitales, estas herramientas se activan para comprobar la información, generando un pago seguro tanto para el comprador como para el vendedor mejorando la experiencia de pagar. El objetivo de las APIs es proporcionar un mayor rango de ventajas, funciones, seguridad y controles a un determinado servicio.
La aplicación de esta tecnología en los pagos digitales agiliza el proceso de las transacciones, además de que brinda un sistema de protección anti fraude tanto para compradores como para vendedores, ofreciendo pagos rápidos y seguros.
“Cuando procesamos un pago en el ecosistema de Mercado Pago, solicitamos cierta información y datos personales de los usuarios como nombre, correo electrónico, teléfono e información de la tarjeta con la cual se va a procesar el pago. Esto con el fin de que nuestra API antifraude califique al comprador, determine un puntaje y se envíe a un escenario de riesgo de acuerdo a los resultados. Este puede ser bajo, medio o alto. Todo esto pasa de forma automática y en menos de un segundo”, afirma Alessandro Labelli, Director de Pagos Móviles de Mercado Pago.
Las APIs son aplicaciones que han llevado a las entidades financieras a la creación de un sector más ágil y capaz de responder a las necesidades de los clientes en tiempo real, aportan un valor añadido a las empresas y les permite ofrecer soluciones innovadoras y seguras.
Estas herramientas tecnológicas ayudan a fomentar la confianza en los usuarios, haciendo los pagos digitales más seguros y eficientando los procesos, lo que se ve reflejado en el aumento del número de operaciones realizadas a través de estos medios digitales. Por ejemplo, Mercado Pago ha tenido un incremento del 112.5% en el total de transacciones procesadas, en comparación con el segundo trimestre del año anterior, y esto mismo está pasando con distintos ecosistemas de pago, ya que cada vez más personas realizan sus pagos a través de fintechs que respaldan sus servicios con APIs.
*De acuerdo con el portal Hipertextual