Los cascos de Realidad Virtual Oculus Rift ya están siendo entregados a sus compradores, y si bien ya te hemos mostrado que la primera orden hecha fue dada a su dueño por el mismo CEO de la compañía, ahora iFixit se ha encargado de desarmar la unidad que han adquirido.
iFixit señala que la versión comercial de las Oculus Rift son fácil de reparar, otorgándoles una calificación de 7 sobre 10 puntos. En su interior pueden encontrarse dos pantallas OLED – a diferencia de la versión para desarrolladores que contaba con una sola pantalla, que de hecho era la utilizada en los Samsung Galaxy Note 3 – que juntas hacen una resolución de 2160 x 1200 píxeles. Le acompañan un acelerómetro, magnetómetro, giroscopio y un rastreador infrarrojo de 306 grados.
Cabe añadir que gracias a los dos paneles independientes, las Oculus Rift tiene una calidad de imagen superior ofrecida por la original, así como por los cascos – también fabricados por la compañía – Gear VR de Samsung.
A continuación te dejamos un video del desarme: