No es un secreto que Android sea el sistema operativo más usado del mundo. Esto ha creado cierta controversia sobre Google, que junto a Apple, son acusadas de mantener un duopolio en el mundo de la telefonía móvil, cosa que es visible cuando otros desarrolladores de sistemas operativos se las han visto negras al momento de convencer tanto a usuarios y a desarrolladores para que su software sea utilizado.
Y ahora la empresa de Mountain View está enfrentando una investigación anti-competencia abierta por la Fair Trade Commission (FTC) que señala que Google ha obstruido el desarrollo de Tizen, el sistema operativo móvil propietario de Samsung, quien es conocida por ser uno de los grandes socios que utiliza el sistema operativo Android, propiedad de la gigante del internet; muestra de ello es el Acuerdo Anti Fragmentación firmado por ambas empresas en la que Samsung no podría utilizar el código de Android para crear un nuevo sistema operativo. La FTC ha presentado documentos al representante del Partido Democrático de Corea, el señor Jeon Hae-cheol .
Google también es acusada de obligar a sus socios a preinstalar sus aplicaciones en los smartphones Android y también a ser el buscador principal en el dispositivo, gracias al Acuerdo de Distribución de Aplicaciones Móviles (Mobile Application Distribution Agreement, abreviado MADA) que la empresa firmó con Samsung; la queja que proviene de las empresas de internet locales Naver y Daum, quienes señalan que el MADA viola la Ley Antimonopolio.
Cabe señalar que en el añp 2013 ya se había abierto un caso contra la Gran G por prácticas monopólicas, sin embargo en se entonces no se encontraron pruebas de que las empresas de internet coreanas se viesen afectadas. Sin embargo, ahora se pide una reapertura del caso ya que la FTC señala que el mercado ha cambiado.
Para darnos una idea de que tan grande es Android, al menos en Corea, al final del mes de enero el sistema operativo del robot verde ocupaba el 80 porciento del mercado móvil en dicha nación asiática.
Por su parte, Google Korea señala que el código de Android es abierto y que los acuerdos firmados con sus socios son voluntarios, por lo cual un fabricante de dispositivos Android no se ve obligado a instalar sus servicios. Añade que varias compañías han utilizado el código fuente de Android como punto de partida para crear nuevos sistemas operativos.