Dos de cada cinco (43%) empresas no protegen sus infraestructuras IoT de forma completa, según revela nuestro reciente informe, Superar los límites: Cómo abordar las demandas específicas de ciberseguridad y proteger el IoT. La investigación también pone de manifiesto que los riesgos de ciberseguridad y las filtraciones de datos son la principal barrera para la implementación de proyectos IoT para muchas empresas.
Según IoT Analytics, se espera que el número mundial de dispositivos IoT conectados crezca un 9%, hasta alcanzar los 27 mil millones de conexiones IoT en 2025. Con ese espectacular incremento también aumenta la necesidad de seguridad. De hecho, Gartner destaca que, en los últimos tres años, casi el 20% de las organizaciones ya han observado ciberataques en los dispositivos IoT de su red.
Aunque dos tercios de las organizaciones (64%) en todo el mundo utilizan soluciones de IoT, el 43% no las protege completamente. Esto significa que para algunos de sus proyectos IoT -que pueden ser desde una estación de carga de vehículos eléctricos hasta equipos médicos conectados- las empresas no utilizan ninguna herramienta de protección.
Los motivos pueden deberse a la gran diversidad de dispositivos y sistemas IoT, que no siempre son compatibles con las soluciones de seguridad. Casi la mitad (46%) de las empresas encuestadas a nivel global temen que los productos de ciberseguridad puedan afectar al rendimiento del IoT, o que pueda ser demasiado difícil encontrar una solución adecuada (40%). Otros problemas comunes a los que se enfrentan las compañías a la hora de implantar herramientas de ciberseguridad son los elevados costos (40%), la imposibilidad de justificar la inversión ante la junta directiva (36%) y la falta de personal o de conocimientos específicos en materia de seguridad IoT (35%).
Por otra parte, los riesgos de ciberseguridad son considerados la principal barrera para la implementación de IoT por más de la mitad de las organizaciones (57%). Esto puede suceder cuando a las empresas les cuesta abordar los riesgos cibernéticos en la etapa de diseño y luego tienen que sopesar cuidadosamente todos los pros y los contras antes de la implementación.
Para ayudar a las organizaciones corregir el déficit de seguridad de sus infraestructuras IoT, es necesario seguir estos pasos:
- Evaluar el estado de la seguridad de un dispositivo antes de implantarlo. Se debe dar preferencia a los dispositivos con certificados de ciberseguridad y a los productos de los fabricantes que prestan más atención a la seguridad de la información.
- Utilizar una política de acceso estricta, la segmentación de la red y un modelo de confianza cero. Esto ayudará a minimizar la propagación de un ataque y a proteger las partes más sensibles de la infraestructura.
- Adoptar un programa de gestión de vulnerabilidades para recibir regularmente los datos más relevantes sobre las vulnerabilidades de los Controladores Lógicos Programables (PLC), los equipos y el firmware, así como aplicar parches o utilizar cualquier solución de protección.
- Consultar el Modelo de madurez de la seguridad del IoT, que ayuda a las empresas a evaluar todos los pasos y niveles que deben superar para alcanzar un nivel suficiente de protección del IoT.
- Utilizar un gateway IoT dedicado que garantice la seguridad y la fiabilidad integradas de la transferencia de datos desde el perímetro hasta las aplicaciones empresariales, como Kaspersky IoT Secure Gateway 100. Es ciber inmune, lo que significa que prácticamente ningún ataque puede afectar a las funciones del Gateway.