Hoy más que nunca el mundo apuesta por el desarrollo de tecnologías para la producción de energías renovables. En los últimos años los impactos del desarrollo industrial basado en combustibles fósiles se han vuelto cada vez más evidentes en la biomecánica de este hogar que es nuestro planeta.
A medida que esta exploración por energía limpia se hace más profunda, surgen nuevas preguntas que antes no eran tan visibles u obvias. Tengamos, por ejemplo, la producción de electricidad mediante turbinas eólicas: son una solución simple, eficiente y práctica, siempre y cuando haya fuertes corrientes de viento que las alimenten, e incluso en los lugares geográficamente más aptos para ello, hay momentos en donde las bajas presiones de aire hacen que el recurso no cumpla con la demanda de los consumidores.

Es en este punto donde ya se han comenzado a dar los primeros pasos en el camino hacia una industria energética limpia y cada vez más práctica. Si bien es cierto que ya se han hecho avances previos en las fuentes de energía renovable, se ha demostrado que es necesario que cuenten con un respaldo de energía que provea un ahorro para los momentos en que el viento no sople o el sol no brille.
Aquí es donde Ocean Battery, el nuevo sistema de almacenamiento de energía, hace su entrada para presentarnos su diseño que, desde el fondo del mar, funciona bajo los mismos principios que una presa hidroeléctrica.

Desarrollado por Ocean Grazer – con sede en Holanda – Ocean Battery consiste en un depósito de hormigón con una capacidad para 20 millones de litros de agua dulce que se almacenan bajo presión, éste depósito se encuentra conectado a una cámara flexible. Este sistema se puede conectar a cualquier generador de energía limpia: cuando hay exceso de energía de las fuentes renovables, se puede bombear agua al depósito de la cámara. Cuando falta energía, la cámara se libera y utiliza la presión del mar para bombear agua de nuevo al depósito haciendo girar las turbinas para generar nueva energía de respaldo.
“Ahora que la energía solar y eólica pasan a ser parte de la red –básicamente esto nos permite deshacernos de los combustibles fósiles- en ese contexto esto es muy emocionante“, opinó el profesor de ingeniería y experto en renovables de la universidad de Waterloo, en Canadá, Claudio Cañizares.