
Ivy St. Ive, la fanática de Pokémon que aprovechó la euforia por Pokémon GO para hacer andar su propio negocio atrapando pokémon para otras personas cobrando por hora, tuvo que desistir de su plan después de ser advertida de un posible bloqueo en la aplicación.
Los interesados en contratar los servicios de la entrenadora debían darle sus nombres de usuario y contraseñas en Pokémon GO y pagarle 20 dólares por hora, con un máximo de 4 horas al día. Ella ingresaría con esos datos y atraparía a cuanto pokémon encontrara, además de registrar las poképaradas de su ruta.
Una foto publicada por @ivystive el
Lo que parecía una prominente carrera de cazadora profesional de pokémon duró menos de lo esperado, ya que se encontró con grandes problemas. Una vez que registró su solicitud de trabajo en la base de daros del sitio de trabajos Craiglist, Ivy recibió un sinfín de peticiones de parte de fanáticos y en pocas horas se saturó de peticiones que fue incapaz de cumplir.
El mayor problema fue que su negocio estaba prohibido por Pokémon Company, y que si insistía, la compañía bloquearía tanto a ella como a sus clientes del juego y de manera definitiva.
Enterada de las advertencias, Ive desistió y retiró rápidamente su anuncio del sitio. A través de una carta que publicó en su cuenta de Twitter, aclaró que al ser tan fanática de Pokémon no iba a arriesgarse a que la bloquearan de algo que esperó desde 1997.
sending this out to reporters today. It was a fun viral run everybody. I’m gonna go hide now :) #GolbatChan #RIP pic.twitter.com/378lAGsYrH
— Ivy St. Ive (@IvesStIve) 13 de julio de 2016