Los servicios online de Sony son nuevamente atacados por hackers

Los servicios online de Sony son nuevamente atacados por hackers

Malas noticias de nueva cuenta para Sony y todos sus millones de usuarios, ya que una vez más han sido víctimas todos sus servicios online, PlayStation Network (PSN), Sony Enterntainment Netwok (SEN) y Sony Online Entertainment (SOE) de un ataque informático, ya que según un comunicado oficial de la misma empresa japonesa, confirman haber registrado un gran número de intentos de acceso no autorizado a cuentas de los servicios antes mencionados. Según Sony, los hackers “tan solo” tuvieron acceso al 0.1% de la base de datos de cuentas de usuario, dicho porcentaje es representado entre 60,000 cuentas de PSN y SEN y 33,000 cuentas de SOE.

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Por otra parte, algo bueno entre todo lo malo, resultó ser que a pesar de que los hackers tuvieron acceso a los nombres de usuario y contraseñas, afortunadamente no se hicieron compras no autorizadas con los números de tarjetas de crédito registrados por los usuarios en los distintos servicios, ya que según la misma empresa nipona, los hackers no lograron tener acceso este nivel de información. Sony ya ha comenzado a notificar a todos los usuarios afectados la importancia enorme de cambiar su contraseña y tener una más compleja y segura.

Aparentemente los hackers consiguieron vulnerar las cuentas utilizando largas listas de nombres de usuario y contraseñas robadas desde otro sitio, del cual aun no se ha mencionado nada por parte de Sony.

Si hacemos memoria esta no es la primera vez que Sony sufre ataques cibernéticos de esta índole, ya que en abril de el presente año la compañía sufrió hasta ahora el mayor ataque cibernético de su historia en donde los hackers vulneraron los datos de más de 100 millones de sus clientes e inclusive información de sus directivos.

Este tipo de ataques ponen de nueva cuenta en el ojo del huracán a Sony y sus sistemas de seguridad, ya que poco a poco va generando desconfianza entre los usuarios y los países que permiten su negocio, como el mismo Japón, que no había autorizado a operar en internet a Sony hasta que garantizara y certificara la mejora y seguridad de sus sistemas.