Según la Organización Mundial de la Salud (OMS) la depresión, es una de las causas más importantes relacionadas con el suicidio, ya que esta enfermedad genera importantes costos individuales, familiares y sociales, los cuales tienden a crecer cada año; se piensa que de seguir así, para el 2030 la depresión podría llegar a ser la primera causa de suicidios en el mundo.
Según la Sociedad Española de Psiquiatría, la depresión es causante de las tres primeras causas de discapacidad médica en España porque trae consigo problemas laborales como pérdida de productividad, jubilación anticipada y ausencia laboral por enfermedad, por lo que constituye un reto para la salud pública disminuir su incidencia.
La depresión puede describirse como un estado de ánimo en el cual una persona tiende a sentirse triste, abatido, cansado, derrumbado y sin ánimos, generalmente por periodos cortos de tiempo; aunque en algunos casos puede llegar a durar varias semanas, llegándose a considerar como una depresión clínica.
Según comentan los especialistas el padecer una depresión puede tener picos muy altos de acuerdo al nivel de afectación, ya que en algunos casos la depresión y la baja autoestima pueden llegar a provocar el suicidio
El suicidio está relacionado con otros trastornos mentales graves, pero, es 21 veces superior cuando se relaciona con casos de depresión. Además de que la depresión se relaciona con otras enfermedades como las cardiovasculares, diabetes, otros trastornos psiquiátricos y con el consumo de drogas.
De hecho en España se dan cerca de 10 muertes por suicidio cada día, convirtiendo esta práctica, en la primera causa de muerte no natural en España.
En México, uno de cada 10 intentos de suicidio se convierte en deceso, lo que nos convierte en el noveno país con mayor número de muertes por suicidio.
Según la Organización Mundial de la Salud “OMS”, el suicidio es la única muerte que puede ser prevenida, aunque no se pueden prevenir todos los suicidios, es importante atender los avisos y señales de un posible intento de suicidio, son pocos los suicidios que se producen sin aviso, por tanto, deben tomarse en serio los avisos que evidencian un posible intento de suicidio y también, las amenazas de infringirse alguna lesión o daño voluntario.
Según las estadísticas de la INEGI para el 2012 en México se registraron 5 549 suicidios, de los cuales 80.6% fueron consumados por hombres y 19.4% por mujeres. El principal método utilizado para cometer el suicidio, tanto en hombres como en mujeres, fue el ahorcamiento, estrangulamiento o sofocación (79.5% y 68.4%, respectivamente). En donde el lugar principal donde ocurren los decesos, tanto en hombres como en mujeres, es dentro de la propia vivienda (72.6 y 79.9%, respectivamente).
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